Me has hecho sentir viva otra vez. Muchas veces te digo que no me importa quien haya estado antes de mí, tampoco cómo me haya sentido yo, lo que vivo es el aquí y ahora. Y mi presente eres tú. Es complicado entender cómo en tan poco tiempo hay personas que calan tan hondo. Da hasta miedo, porque el vértigo es tremendo cuando miras hacia abajo.
Escribo, escribo y sigo escribiendo. Me gusta volver al pasado, a leerme, a recordarme. Esto es lo que soy y todas mis vivencias son lo que me han hecho ser a día de hoy la persona que tienes en frente.
Siempre repito lo mismo, soy todo corazón, pero es la mejor manera que encuentro de definirme. Me entrego, siento y me dejo llevar. Y tú te has puesto en mi camino.
Hablemos de los caminos. ¡La vida es tan injusta poniendo a la persona correcta en el momento equivocado! Sabes que me gusta decir que las cosas las hacemos difíciles nosotros, pero en realidad estamos ante un desafío.
Hay varias cosas que quiero decirte, que no se si sabes, que no se si al menos sientes. Lo primero que quiero decirte es que sé que esto no es un error, porque los errores no se desean con tanta fuerza.
En tan poco tiempo siento que eres mucho para mí, siento que quiero darte cada día más y más y avanzar contigo. Quizás no lleguemos a nada, quizás lo seamos todo, pero hoy siento que eres tú y que por tanto tengo que luchar por esto.
Hoy y desde hace un mes resumo mis pensamientos en una frase:
Lo que quiero contigo no lo quiero con nadie más.
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